El mediapunta bielorruso Alexander Hleb no se pone la camiseta del Barcelona ni para jugar un amistoso. Pep Guardiola prefirió citar a más de 10 canteranos antes que a él, lo que hace casi evidente su salida.
El lugar que Hleb ocupa en el Barcelona podría ser suyo, mío o de cualquiera que le interese tener una rutina deportiva. Y es que Hleb, sin intenciones de subestimarlo, es más pasivo que un jubilado sentado en el banco de la Plaza de toros Monumental de Barcelona una tarde de domingo. ¿Exagero? Pep Guardiola se sonreiría tímidamente y me daría la razón.
Rechazado hasta en las gradas, Hleb es como un conito de entrenamiento para el técnico azulgrana. En el amistoso ante Valeranga, el primero de la temporada, el bielorruso vio como más de 10 canteranos ingresaban al terreno mientras su cuerpo inquieto reposaba en el banquillo; su cara era un lúgubre poema difícil de transcribir con palabras.
La lenta y dolorsa deportación que planean Guardiola y sus secuaces en algún momento le servirá al ex Arsenal para encontrar la llave de la puerta de salida. Y hablando de los Gunners, ¿ellos no se habían vuelto a comunicar con el nacido en Minsk? Es que tanto los de Wenger como el Aston Villa, Manchester City y Sunderland se les podría ocurrir la idea de acobijarlo en la próxima temporada. El mercado inglés podría salvarlo otra vez.
Mar Ago 03, 2010 12:30 pm por 
