El Real Madrid ya ha iniciado los contactos para el fichaje de Mesut Ozil, centrocampista del Werder Bremen. La operación está siguiendo los pasos adecuados para que en el entorno del alemán sean optimistas respecto a la incorporación al equipo blanco de una de las revelaciones del pasado Mundial.
La llave para que la negociación cristalice la tiene Mourinho, que quiere conocer de primera mano al futbolista, como ha ocurrido con Khedira. Por eso se tomará unos días y podría ser a principios de la próxima semana cuando hable con Ozil, que disfruta de sus vacaciones mientras espera noticias sobre su futuro.
Pero antes de llegar a este punto en la planta noble del Bernabéu allanaron el camino en el plano económico. La pasada semana, tres representantes de Eurofinanzas Sport, la empresa que lleva a Ozil en España, se reunieron con Valdano, José Ángel Sánchez y Pardeza para saber las condiciones del internacional. Los agentes explicaron que, pese a que sólo le resta un año de contrato, el Werder Bremen pide por su venta 16 millones de euros, la cifra que figura en el contrato de Ozil.
El cuadro alemán le ha ofrecido dos años más, pero el futbolista no aceptará. Por eso, el Madrid pidió a los agentes que intentasen rebajar el precio del traspaso, como hace meses hicieron Atlético, Sevilla o Valencia, aunque los representantes les trasladaron la dificultad pues hay otros clubes dispuestos a pagar esos 16 millones.
Deseo. A favor del Madrid está que Ozil quiere venir a España y le ha indicado a su agente que no escuche las ofertas italianas (el Inter estaba interesado). Recalar en el Bernabéu es su deseo. El interés del Bar-ça no ha ido a más y todo quedó en una llamada del equipo de Rosell, cuando éste ya era presidente, informándose sobre las condiciones del alemán. Si Mou da el visto bueno, el fichaje puede acelerarse la próxima semana.
Explotó la pasada temporada en el Werder Bremen
Ozil deslumbró con Alemania en el Mundial de Sudáfrica, pero lleva dos temporadas en el Werder Bremen jugando a un gran nivel. Su palmarés cuenta con una Copa (2009) y una Supercopa alemana (2009). Precisamente, Mesut marcó el gol de la victoria en la final de Copa en el Olímpico de Berlín ante el Bayern Leverkusen. Además, el futbolista fue nombrado el mejor futbolista de la primera fase de la Bundesliga (se otorga antes del parón invernal). Su mayor decepción a nivel de clubes se produjo en mayo de 2009, cuando perdió la final de la UEFA ante el Shakthar.